Desafortunadamente,
ya no se puede usar una excusa para poder tener el mínimo contacto que solíamos
tener junto con un comportamiento recto y seco hacia mi persona, no sé si tu
intención sea no lastimarte o hacer las cosas a propósito. De igual forma, tus camaradas
se portan de una manera inadecuada a la que yo los trato, es que esta mierda me
está dejando paranoico o de plano ustedes se van contra mí como si yo fuera el
culpable. Es obvio, son tus amigos, ellos por obligación – Aunque no les caigas
muy bien por tu forma de ser- te van a creer y defender porque soy el malo.
Para mi desfortuna, también admito un poco de inmadurez pero vaya, sólo quería
estar un rato a solas -Sabes de lo que hablo - porque me enojó la manera de responderme aquella vez, no entendí
tú estrés pero simultáneamente desquitabas tu furia conmigo, de
forma controlada. Allá tú porque por fin –Por ahora- no hay quien te aguante en
este ocasión. Por mi parte, a pesar de expresarme de esta manera, estoy hecho
una mierda nena, sinceramente fue un uppercut. Estaré mal un buen rato, porque
lo reconozco, las cosas que vivimos yo nunca las había experimentado con
alguien más, grandioso cariño y el resto de tus características que, no
menciono debido a mi sensibilidad y en cualquier instante podría estallar y sacar
lágrima tras lágrima hasta quedarme dormido.
Todos
en mi círculo social afirmaban que nada estaba perdido, debía tomarte a solas y
conversar, seguramente aún no se creen esto, pero sí, esto ha terminado
definitivamente, más allá de la incomodidad, desconozco personalmente si nos
volveremos a hablar o de menos enviarnos unas miradas, ahorita me importa estar
bien conmigo mismo, ese es un punto, lo segundo sería enterrar temporalmente
todo ya que cada fracción de segundo recordado en estos instantes, me tira y no
me deja estabilizarme.
Bien
me lo dijo mi amiga Alejandra, “nada es para siempre” siempre lo tuve contemplado, desde antes que
me lo mencionaran, pero el lazo entre tú y yo, en mi vida estaba bastante
fuerte. Te pido una disculpa por haber cambiado unos pañales bastante tiempo
pero siendo sinceros, discúlpame por haberte pasar momentos amargos aunque no
fueron los típicos: Celos, acoso y esas cosas. Fueron peleas estúpidas por
arranques de ira intrínsecos o extrínsecos. Estarás en mí, en cada fragmento de
mi piel y lagunas mentales, espero haber logrado lo mismo en tu caso, porque
más que pasarla excelente, es dejar huella y Que me recuerdes.